“Emprender es algo nuevo para mí, pero como dicen con el tiempo las cosas se dan. Estoy feliz de poder ayudar a otros con este producto”

Christian Valenzuela  tiene 33 años, es de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y juega al fútbol en silla de ruedas motorizada desde hace 9 años. Acaba de lanzar al mercado un proyecto personal muy beneficioso: un calentador de manos para la silla. Conocé su historia y producto innovador de industria nacional. 

Entrevistadora: ¿Cómo surgió la idea de crear un calentador de manos?

Christian: Yo hago fútbol en silla de ruedas motorizada hace 9 años, y todo esto surgió por ese motivo. En invierno, a las personas con movilidad reducida se nos suele enfriar las manos y se nos complica manejar la silla por ese motivo. Sobre todo cuando hacemos deporte. Entonces, hace unos años, compré un calentador de manos y surgió la idea a partir de eso de armar un prototipo de calentador de manos. 

E: ¿Cuántos años hace que pensaste en ese primer prototipo y cómo pudiste concretarlo?

C: Esta idea la tenía hace 4 o 5 años, pero hace unos meses me contacté con un ingeniero al que le interesó la idea. El analizó mi calentador y, en función de eso, armó un calentador de manos de industria argentina y mucho más económico del que yo había comprado. Los primeros prototipos fueron destinados a los compañeros que juegan conmigo en la Asociación Argentina de Fútbol sobre silla de ruedas motorizada, que también tienen Distrofia Muscular.  

La Asociación Argentina de Fútbol sobre Silla de Ruedas a Motor (AAFSM), es una asociación sin fines de lucro, que tiene como objetivo impulsar la práctica del deporte en silla de ruedas motorizada y, a su vez, generar actividades recreativas, logrando lazos tanto grupal como deportivos, mejorando la calidad de vida de las personas con discapacidad. En los últimos años el seleccionado argentino viene participando en mundiales y en competencias sudamericanas, y a nivel nacional se busca consolidar la Liga Federal con 20 equipos y más de 300 jugadores destacados.

E: ¿Cómo surge la idea de hacer este producto masivo, es decir, más allá del deporte?

C: A raíz de eso a mi se me ocurrió también que se podría utilizar como uso diario. A veces pasa que, cuando hace mucho frío, se te enfrían las manos y se pierde la movilidad para manejar bien la silla motorizada. Entonces llevar el prototipo a la vida diaria va a ayudar a  muchos porque evitará que se enfríe la mano y no se pueda mover. Esto pienso que es útil tanto para personas con distrofia como para cualquier otra condición que implique una silla de ruedas. 

Gracias a dios se me cumplió el deseo de que alguien se interese en mi prototipo, y ahora hay que darle para adelante para que otras personas puedan tenerlo también y facilitarles la vida diaria.

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Christian Valenzuela

E: ¿Cómo funciona y cuáles son los requerimientos técnicos?

C: El calentador  funciona con la misma batería de la silla, se puede conectar a motorizada y no consume mucho, alrededor de 1 watt. Se puede utilizar en cualquier silla, la idea surgió para que yo pueda jugar al fútbol pero la intención es que le sirva a todos para la vida diaria y no solo el fútbol. Lleva una capa de plástico que envuelve la superficie del joystick y hace que permanezca el calor y no se disipe.

E:  ¿Cómo fue tu camino como emprendedor? ¿Cómo te sentiste cuando viste que este proyecto funcionaba?

C: En parte me dio alegría porque encontré a alguien que le interesó la propuesta. Y muchos compañeros se sintieron cómodos con el aparato y el calor que daba. En este sentido bien,  esto es algo nuevo para mi, es la primera vez que me asocio a alguien con el fin de ayudar a otras personas. Lo veía lejos pero como dicen con el tiempo las cosas se dan.

E:  ¿Cuáles son los próximos pasos en tu emprendimiento?

C: Ahora hay que trabajar en mejorar el mismo producto. Más adelante tengo otros proyectos, como un prototipo de sillas para deporte más económicas, ya que las que usamos actualmente son muy costosas. ¡Pero paso a paso! Por ahora estamos con el tema del calentador de manos. 

Lo que tiene este deporte puntualmente es que es caro la silla de ruedas, y lamentablemente no es accesible para todos. Yo tengo una silla que es de los primeros modelos que hubo. Si se puede hacer algo más económico para incluir otros jugadores sería genial. A veces pasa que hay chicos que juegan con su sillas de uso diario y se complica porque son más lentas. Si hay una silla más económica se van a sumar más jugadores, esa es mi idea. Básicamente, quiero ayudar a la comunidad en general.  El calentador de manos va a ayudar mucho. 

 

Christian Valenzuela

E:  Cuando tus compañeros probaron el prototipo, ¿qué sentiste vos ante la reacción de ellos sabiendo que los beneficiaba tu creación?

C: Me sentí contento, alegre de que va a servir en este caso para mejorar los entrenamientos. Hay chicos que por ahí están jugando bien 10 minutos y después tienen las manos heladas y ya no pueden hacer más movimientos. Eso también los va a incentivar y los va a mejorar en el rendimiento deportivo para no frustrarse y seguir.

Podés contarte con Chirtian Valenzuela  vchris89@gmail.com por email o vía Instagram https://www.instagram.com/vchris_89/?hl=es

 

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